Las autoridades de Honduras y Guatemala han tomado distancia de la incautación de un cargamento de cocaína realizado el pasado viernes en República Dominicana, dejando claro que no tuvieron ninguna implicación en el traslado de la droga.
Según un comunicado de la Dirección General de Aduanas de Honduras, la carga decomisada, que consistía en 9.588 kilos de cocaína, nunca pasó por el territorio hondureño.
La institución aclaró que, según la trazabilidad de la carga realizada por la Unidad de Control de Contenedores (UCC) y certificada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), los contenedores en los que se halló la droga nunca tocó suelo ni puertos hondureños.
— Aduanas Honduras (@AduanasHonduras) December 10, 2024
De esta manera, las autoridades aduaneras desmintieron cualquier vínculo con la operación y confirmaron que no hubo movimiento de estos contenedores en el puerto de Puerto Cortés.
Por su parte, el Gobierno de Guatemala también se desmarcó de la incautación, explicando que el contenedor que contenía la droga fue revisado minuciosamente antes de salir de su territorio.
El Ministerio de Gobernación guatemalteco precisó que el contenedor fue inspeccionado mediante un escáner, lo que permitió certificar que no contenía sustancias ilícitas antes de ser embarcado. Según las autoridades, el contenedor salió de Veracruz, México, y llegó al puerto de Puerto Barrios en Guatemala, donde se incorporó carga local antes de ser enviado a Puerto Cortés en Honduras y luego a Puerto Caucedo, en República Dominicana.
Aunque las primeras investigaciones apuntan a que la cocaína podría haber tenido su origen en Guatemala, el Gobierno guatemalteco aseguró que está llevando a cabo todas las investigaciones necesarias para esclarecer los hechos y determinar si hubo alguna responsabilidad por parte de sus autoridades.
“Todas las hipótesis están siendo investigadas”, afirmaron.
El decomiso de la cocaína en República Dominicana ha sido calificado como uno de los más grandes en la historia del país, con un valor estimado en 250 millones de dólares.
A día de hoy, al menos diez personas vinculadas al puerto dominicano están bajo investigación, mientras continúan las pesquisas para rastrear el destino final del cargamento, que presuntamente tenía como destino Bélgica.
La droga fue finalmente incinerada el lunes en el municipio de Pedro Brand, cerca de Santo Domingo.
Mientras tanto, tanto Honduras como Guatemala han reiterado su compromiso en la lucha contra el narcotráfico, destacando la importancia de las investigaciones en curso y su disposición para colaborar en el esclarecimiento de los hechos.