Las autoridades migratorias de Panamá esperan un aumento del tránsito irregular de migrantes por su territorio, tras detectarse que solo en el primer semestre del año 2023 atravesaron el territorio más de 200,000 personas.
De acuerdo con el informe del Servicio Nacional de Migración (SNM) hasta el pasado 5 de julio cruzaron la jungla 201,167 caminantes, cifra que supera a la del primer semestre de 2022 cuando utilizaron esa vía 49,452 personas.
“La cifra de migrantes irregulares, que ingresan ilegalmente por las diversas trochas de la provincia del Darién, desde enero 2023 hasta este miércoles (…) registra un total de 201,167 personas”, informó Panamá.
De enero 2023 hasta hoy miércoles, 5 de julio, han ingresado por las selvas de Darién un total de 201 mil 167 migrantes irregulares, lo que representa un aumento considerable en comparación al primer semestre de 2022, cuya cifra fue de 49,452 personas. #MigraciónSegura🇵🇦 pic.twitter.com/q3IBV2n6wy
— Ministerio de Seguridad Pública de Panamá (@MinSegPma) July 6, 2023
La selva del Darién es una ruta peligrosa, con amenazas naturales, ríos crecidos, animales salvajes, agua contaminada por cadáveres y excrementos de los migrantes, junto a actividad criminal: asaltos, violaciones, homicidios y tráfico de armas y drogas.
Entre las nacionalidades que pasaron por el país sobresalen venezolanos (103,028), haitianos (33,553), ecuatorianos (25,925), chinos (8,964) y colombianos (6,489); ciudadanos de otros países suman 23, 208 migrantes.
El SNM señaló en su reporte que abril fue el mes con mayor número de migrantes irregulares que ingresaron a Panamá: 40,297, seguido de mayo (38,962) y marzo (38,099).
El total de migrantes a su paso por Panamá en 2022 fue de 248,284, un número sin precedentes hasta entonces y se espera que este año la cifra se duplique si continúan a este ritmo los flujos de viajeros ilegales.
Para el SNM, aunque la migración es un derecho universal, es importante realizar la movilidad de forma regular, ordenada y segura, al tiempo que advirtieron de los peligros de cruzar esta selva fronteriza con Colombia, en la que además de amenazas naturales se suman los ataques de bandas criminales.
La Organización de Naciones Unidas ha reconocido que el tráfico migratorio en el continente americano se debe al escape de miles de personas de crisis económicas, de la violencia política y delictiva o de los efectos del cambio climático en las poblaciones, lo que favorece el tráfico de personas y la trata de personas en la región.