Un albergue con una docena de construcciones prefabricadas y varios vehículos fueron incendiados este sábado en un albergue de migrantes en San Vicente, en la selva panameña del Darién, tras una discusión entre dos mujeres, informó el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront).
Al menos 44 migrantes han sido arrestados pero no hubo víctimas mortales. Las autoridades calculan las pérdidas en 800 mil dólares.
Según el Senafront, en horas de la madrugada se registró una discusión entre dos mujeres migrantes irregulares por una carpa, en dicho incidente intervienen las parejas de ambas migrantes lo que desencadena una pelea tumultuaria entre los distintos grupos que ahí se encontraban.
Otros migrantes, aproximadamente unos 250 habría atacado a los policías fronterizos lo que provocó un despliegue mayor.
“Estos actos de violencia trajeron como consecuencia afectaciones graves sobre este albergue, en donde se destruyeron vehículos oficiales y civiles, al menos 11 modulares incendiados, así como el modular del personal del Senafront Y migración y el centro de operaciones de dicha estación”, informa el comunicado.
La Policía fronteriza panameña dijo que ha identificado y retenidos a unos 44 migrantes irregulares “que participaron en estos hechos vandálicos y serán investigados y procesados ante el ministerio público por daños a la propiedad del estado”.
La directora del Servicio Nacional de Migración de Panamá, Samira Gozaine, dijo que el incidente provocó “la destrucción de 11 modulares, daños cuantiosos de los colchones, todos los implementos de tecnología que Migración tenía en el área, 20 laptops, todos los elementos personales quedaron quemados, escogieron especialmente los modulares donde tenían el equipo”
“Dañaron las instalaciones donde tenían el consultorio clínico, el comedor de nuestros funcionarios, pérdidas cuantiosas. Más de 800 mil dólares en pérdidas”, dijo Gozaine.
COMUNICADO
Migrantes irregulares vandalizan la estación temporal de recepción migratoria, ubicada en San Vicente a unos 10 minutos del centro de Metetí.
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Según el Senafront, la estación temporal de recepción migratoria, era una de las instalaciones más modernas y dignas. Contaba con los servicios básicos para atender de manera humanitaria a esta población y tenía una capacidad para albergar a unas 500 personas.
No hay detalle de la nacionalidad de los migrantes involucrados en el incidente.
Más de medio millón de migrantes pasaron el año pasado por la Selva del Darién, provocando una crisis humanitaria sin precedentes en el país centroamericano. El gobierno de Laurentino Cortizo ha calificado de “crisis de seguridad nacional” la migración.
La Selva del Darién, entre Colombia y Panamá, es un terreno inhóspito, sin carreteras, con una fuerte presencial del narcotráfico y de bandas de traficantes de personas. Médicos Sin Fronteras ha denunciado un aumento exponencial de abusos sexuales contra mujeres migrantes en la zona.