El Papa Francisco dijo que el dictador nicaragüense Daniel Ortega pareciera ser alguien con desequilibrio y su régimen lo comparó con el comunista de 1917 o el de Hitler del 35, tras ser preguntado sobre la persecución de la iglesia y el encarcelamiento de opositores y el destierro de los mismos en el país centroamericano.
“Con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige [Ortega]. Ahí tenemos un obispo preso, un hombre muy serio, muy capaz. Quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio. Es una cosa que está fuera de lo que estamos viviendo, es como si fuera traer la dictadura comunista de 1917 o la hitleriana del 35, traer aquí las mismas”, respondió el Pontífice en una entrevista a Daniel Haad, de Infobae.
“Son un tipo de dictaduras groseras. O, para usar una distinción linda de Argentina, guarangas. Guarangas (mal educado, grosero o vulgar)”, agregó.
La respuesta del Papa ocurre algunas semanas después que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, su esposa y vicepresidenta, liberara a 222 presos políticos y los desterrara, retirándoles su nacionalidad.
Unos días después el régimen, también le quitó la ciudadanía a 94 opositores más, quienes estaban en el exilio, entre ellos importantes literatos como Sergio Ramírez y Gioconda Belli.
El 22 de febrero pasado, Ortega, quien lleva en el poder desde 2007, llamó “mafia” a la Iglesia Católica y al Vaticano, y en una transmisión en vivo dijo no respetar ni a los papas ni a los obispos de Nicaragua.
El régimen nicaragüense ha prohibido de nuevo las procesiones del vía crucis este año y las actividades religiosas de este tipo son realizadas en silencio dentro de los templos en ese país.
Además, el obispo Rolando Álvarez, quien se negó a dejar su condición de preso político y a ser desterrado, fue condenado a 26 años de cárcel por varios presuntos delitos en un juicio cargado de irregularidades.
Álvarez es la voz más crítica de la iglesia en contra del dictador.