Policía hondureña es blanco de fuertes críticas después que agente mató a tiros a perro

La Policía Nacional de Honduras está en un nuevo escándalo, esta vez porque uno de sus agentes disparó contra un perro, provocándole la muerte. El ataque que ha provocado indignación quedó registrado en un video.

 

El Ministerio Público (MP) de Honduras ha presentado un requerimiento fiscal contra Edwin Fernando Corea Núñez, un agente de la Policía Nacional, acusado de maltrato animal en perjuicio de un perro llamado “Toby”. 

Este hecho ocurrió en el barrio Las Colinas, Choluteca, el pasado 5 de diciembre, y ha causado un profundo rechazo en la ciudadanía. El ataque a tiros contra el can quedó grabado en un video.

El caso surgió durante un patrullaje rutinario en el que los agentes intentaron detener a 2 personas en motocicleta que se comportaban de manera sospechosa. 

Tras una persecución, los sospechosos fueron interceptados, pero no se encontraron pruebas de un delito. 

Uno de los detenidos fue liberado en el lugar, y la situación parecía resolverse. Sin embargo, durante el operativo, el agente Corea Núñez disparó su arma de fuego, hiriendo gravemente a “Toby”, un perro que se encontraba en el lugar. 

A pesar de los esfuerzos del jefe regional de la Policía Nacional, quien trasladó al animal a una clínica veterinaria, el canino murió debido a la gravedad de sus heridas.

Este suceso ha generado una ola de indignación tanto en Choluteca como a nivel nacional, al poner en evidencia un abuso de poder por parte de un miembro de la Policía Nacional y resaltar la vulnerabilidad de los animales ante actos de violencia. 

A pesar de que el agente Corea Núñez no fue encarcelado, el Juzgado de Letras de la Sección Judicial de Choluteca impuso medidas cautelares distintas a la prisión preventiva, y el proceso judicial continúa su curso conforme a lo establecido por la ley.

El maltrato animal está tipificado como un delito en el Código Penal de Honduras, que establece una pena de hasta cinco años de prisión para quienes causen la muerte intencional de un animal. 

Además, la Ley de Protección Animal de 2016 estipula penas de 3 a 5 años de reclusión y multas de hasta 25 salarios mínimos para quienes maltraten a los animales, como sucedió en este caso.

Las organizaciones defensoras de los derechos de los animales han expresado su indignación por la manera en que la Secretaría de Seguridad ha manejado el caso, considerando que el incidente constituye un claro abuso de poder. 

Ante la falta de respuestas satisfactorias, han convocado una movilización para el sábado 14 de diciembre, con el objetivo de exigir justicia en el caso de “Tobi” y el cumplimiento efectivo de la Ley de Protección Animal en Honduras.

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