Los proveedores de la Minera de Panamá, subsidiaria de la canadiense First Quantum Minerals, pidieron al recién electo presidente José Raúl Mulino que reactive la operación del yacimiento de cobre tras ocho meses de su cese por masivas protestas.
En una carta enviada al mandatario, con fecha 17 de julio de 2024, el grupo de proveedores planteó que la minera representaba $960 millones, con una planilla de empleados que supera los 200,000 trabajadores.
Tras el paro de operaciones, ordenado por la Corte Suprema de Justicia después de varios días de masivas protestas contra el proyecto, los proveedores aseguran que tuvieron que reducir en casi un 85 % sus actividades, incluyendo la fuerza laboral.
“Consideramos que no es justo que toda una industria, que operó de manera transparente y contribuyó a una amplia red económica, así como a la seguridad social y económica de miles de panameños, se vea perjudicada por el descontento masivo con la pasada administración”, señaló el grupo, que tildó a los movimientos de protestas de “falso ambientalismo desinformado maliciosamente”.
El tema de la mina también fue abordado por el Presidente Mulino. pic.twitter.com/3pDnueJEh3
— Alvaro Alvarado – Noticias 180 Minutos/ Sin Rodeos (@AlvaroAlvaradoC) July 1, 2024
En el texto, los firmantes piden una reunión con el presidente Mulino para manifestar sus preocupaciones y propuestas de reactivar el yacimiento, considerado el más grande a cielo abierto de Centroamérica.
El cierre de la minería deterioró las proyecciones económicas de Panamá para 2024, que pasará de ser la economía de mayor crecimiento en 2023 a ubicarse en el último peldaño en Centroamérica, desbancando a El Salvador. El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que Panamá pase de expandirse un 7.3 % el año pasado a un 2.5 % en 2024.
First Quantum Minerals producía desde 2019 más de 300,000 toneladas anuales de concentrado de cobre, que representaban un 75 % de las exportaciones y un 5 % del Producto Interno Bruto (PIB).