Chiriquí poco a poco avanza hacia la normalidad, después de más de un mes de cierres de calles y carreteras provocadas por las protestas contra la minería y de ser la provincia más golpeada durante la crisis.
El turismo y comercio poco a poco se revitalizan en medio de una profunda crisis económica dejada por la escasez general que hubo en esta provincia, la más golpeada durante las prolongadas jornadas de rechazo al multimillonario contrato minero entre el gobierno y una firma canadiense que terminó siendo declarado como institucional.
El Ministerio de Trabajo reportó que a pesar de la reactivación de las actividades en general, aún hay más de 100 empresas que mantienen las solicitudes de suspensión de contratos laborales para sus empleados o la disminución de las jornadas de trabajo.
Hermenegildo Becker, del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Social, informó que desde la semana pasada inició el levantamiento de la reducción laboral en general.
El abasto de combustibles, gas propano, que por más de dos semanas causó escasez por completo en la región, fronteriza con Costa Rica, se ha regularizado.
Los agricultores, que perdieron cosechas enteras en medio de la crisis, ahora ya pueden llevar sus productos a los diferentes mercados del país.