Tres de los presbíteros desterrados y despojados de su nacionalidad nicaragüense por la dictadura de Nicaragua han sido asignados como vicarios parroquiales en varias iglesias de la Diócesis de Limón, Costa Rica.
Todos los nombramientos fueron notificados a través del obispo monseñor Javier Román Arias y el canciller de esa Diócesis, monseñor David Fuentes Quirós a través por medio de un comunicado que dicha instancia emitió el pasado 30 de abril en las celebraciones del domingo de pascua y domingo el buen pastor.

El sacerdote Juan Francisco Zeledón Montenegro era párroco de la iglesia San Francisco de Asís en Río Blanco, uno de los municipios más prósperos y grandes del departamento de ,al norte de Nicaragua. El religioso fue nombrado vicario de la parroquia Inmaculada ,en el cantón de Guácimo, Provincia de Limón.
En cambio, el sacerdote Mangel Hernández, quien era el párroco de la parroquia San Juan María Vianney en la ciudad de Matagalpa, fue puesto como vicario parroquial en la iglesia San José Patriarca, en el cantón de Siquirres, la cual se ubica a unos 11 kilómetros de la capital costarricense.
Además, el padre Vicente Martínez Bermúdez, párroco de la iglesia Santa Lucía en la ciudad de Darío, en el mismo departamento antes de ser desterrado, fue asignado como vicario parroquial en la iglesia Inmaculada Concepción en Cariari, en el quinto distrito del cantón de Pococí en Limón.
También se conoció de otros nombramientos de los sacerdotes Alexánder Oviedo Marín, Armando Campos Chacón y Félix Fuentes Elizondo como vicarios parroquiales en diferentes templos católicos en la Sagrado Corazón de Jesús en Guápiles; San Daniel Camboni, en Cieneguita, y Santa Teresita del Niño Jesús, en Cairo, respectivamente.