Un informe de la Fundación por la Libertad de Expresión y Democracia (FLED), emitido este 10 de abril en las redes sociales, reveló que 36 periodistas nicaragüenses abandonaron el oficio en el primer trimestre de este año, entre otras razones, por la represión gubernamental, la asfixia económica al sector y el exilio.
El informe trimestral (enero-marzo 2024), sobre casos de violaciones a la Libertad de Prensa en Nicaragua, además, revela que el apagón informativo impuesto por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, ha alcanzado a 7 de los 15 departamentos y 2 regiones autónomas del país, donde las voces críticas del periodismo han desaparecido totalmente.
La Fundación por la Libertad de Expresión y Democracia (FLED) pone a disposición de sus audiencias el Informe Trimestral (enero-marzo 2024), sobre casos de violaciones a la #LibertadDePrensa en #Nicaragua. Somos miembros de la red @VDSorg.https://t.co/H2I41oMGUw pic.twitter.com/egDGF7TSMl
— FLED (@FLED_ong) April 10, 2024
Los lugares donde ya no hay medios o espacios independientes son: Carazo, Chontales, Jinotega, Madriz, Nueva Segovia, Región Autónoma del Caribe Sur y el Caribe Norte.
Silencio en el dial
De acuerdo al informe de FLED, en los diferentes departamentos del país, los pocos medios de comunicación locales que operan han sacado de su programación los noticieros, y el abordaje crítico de temas sociales y políticos.
En contraste, en la actualidad predomina la promoción de la agenda de las alcaldías y de las instituciones del Estado, los temas culturales, publicidad de negocios locales y se ha cedido varios espacios a pastores evangélicos, “estos últimos en su mayoría nuevos aliados del gobierno de Nicaragua en el contexto del ataque en contra de la Iglesia Católica”.
Un ejemplo del control gubernamental sobre los medios es que en la pasada Semana Santa 2024, la mayoría de los medios locales evitaron hablar o dar cobertura periodística a las actividades católicas en departamentos y municipios donde fueron permitidas con severas limitaciones las procesiones.
Dictadura y voceros mantiene discursos de odio
“Se observó que los medios de comunicación enfocaron su agenda en la promoción de actividades de verano (playas) y opciones de gastronomía. Este nuevo comportamiento es similar al de los medios oficialistas”, dice el informe.
Lo que si continúa igual en el panorama de los medios en Nicaragua son las campañas y discursos de odio de parte de la dictadura y su coro de propagandistas, según FLED.
“Las agresiones verbales por parte de voceros gubernamentales en contra de periodistas independientes se mantienen en el país, siempre ‘como un intento fallido’ de descalificar el trabajo de denuncia y fiscalización, que realizan los medios de comunicación. Estos discursos de odio que se emiten muestran en sí, un nivel de baja autoestima y complejo de inferioridad que podría catalogarse como delirio visceral”.
251 periodistas exiliados
También continúa la fuga de periodistas de sus funciones sociales: “Logramos comprobar que un número indeterminado de periodistas han abandonado la profesión y en la actualidad se dedican a otras labores económicas para obtener el sustento de sus familias”.
“FLED tuvo conocimiento que producto de la represión, el asedio y la intimidación en contra de la prensa independiente, durante el trimestre enero-marzo 2024, al menos 9 periodistas se vieron obligados a exiliarse. Hasta marzo de 2024 alrededor de 251 periodistas, comunicadores, directores y otros trabajadores de medios de comunicación han tenido que salir del país de manera forzada”.
También, se ha documentado la denuncia de periodistas exiliados, quienes indican que sus familiares que se encuentran en Nicaragua, en varias oportunidades, han sido víctimas de asedio e intimidación por oficiales de policía al servicio de la dictadura Ortega-Murillo.
Factores que explican por qué se están extinguiendo los periodistas en Nicaragua
El informe detectó 5 factores principales que están afectando el ejercicio del periodismo en Nicaragua:
- Relevo generacional en riesgo: La represión contra los medios y el cierre y confiscación de las universidades han afectado gravemente el relevo generacional.
- Los riesgos: La dictadura de la familia Ortega-Murillo ha criminalizado el ejercicio del periodismo y los comunicadores que ejercen corren el riesgo de perder su libertad, sus bienes, su integridad física y hasta su vida.
- Desempleo y precarización de los salarios en el periodismo En el contexto de hostilidad en el que está sumergida la profesión, la precarización de los salarios, agrava aún más su situación. La falta de estabilidad laboral y la insuficiencia de ingresos económicos han llevado a muchos profesionales a abandonar la profesión, y dedicarse a otras actividades económicas o emprendimientos que les brinden una mayor seguridad financiera.
- Dificultades en el exilio para ejercer: Más del 50 por ciento de los periodistas exiliados se encuentran en Costa Rica, donde las medidas migratorias restrictivas impuestas por el presidente Rodrigo Chaves han dificultado el acceso a mejores condiciones laborales para los periodistas que tratan de ejercer la función en el exilio.
- Aplicación de leyes represivas: Periodistas dentro y fuera de Nicaragua temen seguir en el ejercicio por el temor que se les aplique la desnacionalización, confiscación de sus bienes o secuestro de sus familiares en Nicaragua, a consecuencia de las leyes represivas que la dictadura criminal Ortega-Murillo ha implementado desde 2018.