Un informe de Estados Unidos señala graves y sistemáticas violaciones a derechos fundamentales de los ciudadanos en El Salvador durante 2022, entre los que figuran señalamientos de homicidios arbitrarios, torturas, condiciones carcelarias indebidas, acoso a periodistas y la falta de independencia judicial y legislativa, entre otros.
Los casos apuntados ocurrieron en 2022, año en que entró en vigencia el régimen de excepción que se mantiene y ha sido prorrogado cada mes y que ha permitido encarcelar a por los menos 65,000 pandilleros.
De acuerdo al apartado sobre El Salvador de los informes de países sobre prácticas de derechos humanos 2022 divulgado por el Departamento de Estado, las “cuestiones importantes de derechos humanos incluyeron informes creíbles” que abordan las situaciones señaladas.
El informe da cuenta de graves casos de corrupción en la que están involucrados agentes del estado, así como “serias restricciones a la libertad de expresión y de los medios de comunicación, incluida la censura y las amenazas de hacer cumplir las leyes penales para limitar la expresión”.
Se reporta también la persistencia de la impunidad en las fuerzas de seguridad, de funcionarios y de personeros del poder judicial.
“Hubo informes de que el gobierno o sus agentes cometieron homicidios arbitrarios o ilegales, en gran parte derivados de la muerte de detenidos mientras estaban en prisión durante el estado de excepción”, dice el reporte en la Sección 1, respeto a la integridad de la persona. En esta se da cuenta de la “privación arbitraria de la vida y otros homicidios ilegítimos o por motivos políticos”.
“Los medios de comunicación y los grupos de derechos humanos informaron que las desapariciones no relacionadas con el gobierno, que ellos y las familias de los desaparecidos atribuyeron a la violencia de las pandillas, continuaron ocurriendo de manera regular”, añade.
Aunque aclara que el exprocurador de Derechos Humanos, Apolonio Tobar, aún siendo funcionario, dijo en agosto que de las más de 173 denuncias que recibieron sobre violaciones a garantías fundamentales en el marco del régimen de excepción, en el 95% de estas no encontraron evidencias de ello.
“Las condiciones carcelarias empeoraron durante el estado de excepción. El número de reclusos se duplicó con creces a los pocos meses del inicio del estado de excepción, lo que generó denuncias de hacinamiento grave, condiciones sanitarias inadecuadas, escasez de alimentos, falta de servicios médicos en las instalaciones penitenciarias y agresiones físicas”.
Informe de Derechos Humanos de Estados Unidos.
También denuncia los casos de acoso contra periodistas fustigados por funcionarios públicamente o sometidos por fuerzas de seguridad en el ejercicio de sus labores comunicacionales y da cuenta del caso de 10 periodistas que se exiliaron, debido a las presiones sufridas, principalmente de círculos oficiales.
El informe también incluye “la falta de investigación y rendición de cuentas por violencia de género; barreras significativas para acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva; y delitos que involucran violencia contra personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer e intersexuales”.