La dictadura de Nicaragua arremetió contra otros 94 opositores y les despojó su nacionalidad, entre estos el respetado escritor Sergio Ramírez, el obispo auxiliar de Managua Silvio Báez, líderes políticos, periodistas, defensores de derechos humanos, exdiplomáticos.
En la nueva estocada del régimen Ortega-Murillo, los nicaragüenses fueron declarados “prófugos de la justicia” y se ordenó la confiscación de sus bienes.
En el listado de nicaragüenses despojados de su ciudadanía también está el periodista Carlos Fernando Chamorro y su esposa Desirée Elizondo; los defensores de Derechos Humanos, Vilma Núñez, Gonzalo Carrión y Álvaro Leiva; la escritora Gioconda Belli; el excomandante de la Dirección Nacional del FSLN en los años 80, Luis Carrión; la exguerrillera Mónica Baltodano; el excanciller Norman Caldera; el exembajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Arturo McFields; el exfiscal Yader Morazán; y el exdiputado Eliseo Núñez Morales.
También figuran los periodistas Javier Galeano, Wilfredo Miranda, David Quintana, Jenniffer Ortiz, Lucía Pineda, Álvaro Navarro, Manuel Díaz, Patricia Orozco, Aníbal Toruño, entre otros. Además los sacerdotes Edwing Román y Uriel Vallejos.
La resolución de la dictadura de Daniel Ortega fue leída este miércoles por Ernesto Rodríguez, magistrado presidente del Tribunal de Apelaciones de Managua.
La decisión fue tomada menos de una semana después que el régimen liberara a 222 presos políticos y los desterrara. Todos fueron acogidos con parole humanitario por Estados Unidos, además España ha ofrecido esa nacionalidad.