El esfuerzo articulado por la Fiscalía Primera Superior Especializada en Delitos relacionados con Droga y la Policía Nacional, dejó como resultado la detención de una célula de narcotráfico y crimen organizado integrada por 26 personas en el marco de una operación conjunta nombrada Equinos, la cual también contó con el apoyo del Servicio Nacional de Aeronaves (SENAN), desarrollada en diversos lugares de las provincias de Panamá, Coclé y Panamá Oeste.
Marta Barrios, fiscal superior de Drogas, afirmó que,
De las 26 personas detenidas, 24 son panameñas, las cuales están vinculadas a la recepción y transporte de drogas procedentes de Colombia. En la redada, decomisaron 4 armas de fuego, 8 proveedores, 42 municiones y 1,419.000 de dólares en efectivo.
Asimismo, la redada dejó como resultado el decomiso de 7,661 paquetes de drogas en distintos puntos. Para llegar a ello, inteligencia interceptó llamadas telefónicas, vigilancia y seguimiento, al igual que ubicaciones y reconocimientos, etc.
Desde enero de 2022 empezaron a realizar las respectivas investigaciones y a darle seguimiento de cerca a través de los agentes de inteligencia de la Fiscalía, para capturarlos.
La célula está integrada por panameños, colombianos y ecuatorianos, quienes centraban sus operaciones en las provincias de Panamá y Coclé.
Al respecto, el Ministerio Público compartió que entre los detenidos se encuentran alias “Reloj”, alias “Bebé” y alias “Chango”, quienes son los supuestos líderes de esta banda, quienes además del narcotráfico se dedicaban al blanqueo de capitales y sostenían reuniones para cometer delitos relacionados a la droga. Y eran los principales enlaces de contactos con las organizaciones criminales en Colombia, quienes trasladaban la mercancía con lanchas rápidas en el sector costero de Coclé y Farallón.
De igual manera, se conoció que entre los detenidos se encuentran alias “Viejo Barba”, “Popocho”, “Jefry”, “Patacón”, “Geño”, “Will”, “Trola”, “La Tierna” y “Bin Laden”, entre otros.
Las autoridades dijeron que la banda coordinaba encuentros para conspirar, recibir, almacenar y custodiar los cargamentos de droga que llegaban desde Colombia.
Los detenidos recibían las sustancias a través de las costas de Coclé, en el área de Farallón. Una vez la droga en territorio panameño, los miembros de la célula se encargaban de encaletar y guardar cargamentos para posteriormente trasladarla a la Ciudad de Panamá en vehículos con doble fondo.