Los Ministerios Públicos de Costa Rica y de El Salvador acordaron fortalecer la colaboración internacional con el objetivo de intensificar la persecución del crimen en ambos países.
El fiscal general de Costa Rica, Carlo Díaz, se reunió en San José con su homólogo de El Salvador, Rodolfo Delgado, donde firmaron un memorando de entendimiento y discutieron sobre los desafíos delictivos en cada nación y los esfuerzos para combatirlos.
Este tiene como finalidad “facilitar la colaboración entre los órganos encargados de presentar acusaciones, permitiendo así mejorar las labores conjuntas” y con ello “agilizar coordinaciones, reuniones, intercambios de información, y mejorar en temas de capacitación y otras formas de cooperación”, señaló el Ministerio Público costarricense en un comunicado.
El fiscal salvadoreño destacó que el objetivo del memorando es “agilizar la fluidez de la información entre los dos Ministerios Públicos”, lo que a su vez “permitirá acelerar muchos procesos”.
Como parte de las actividades, ambos fiscales se reunieron con el presidente de la Corte Suprema de Justicia de Costa Rica, Orlando Aguirre, quien agradeció la visita y resaltó las similitudes que benefician el trabajo conjunto entre ambas naciones.
El Ministerio Público de El Salvador también mostró interés en conocer el funcionamiento de las fiscalías electrónicas que operan en Costa Rica, así como el sistema informático implementado.
Un equipo de la Fiscalía Adjunta del II Circuito Judicial de San José proporcionó a la delegación salvadoreña una explicación detallada de cómo se tramita un expediente electrónico, incluyendo la incorporación de pruebas, informes de la policía judicial y declaraciones de testigos.
Es importante destacar que la situación de seguridad en ambos países es dispar: bajo la administración de Nayib Bukele y sus planes de seguridad, El Salvador ha logrado reducir significativamente la violencia y la inseguridad criminal en las calles.
En contraste, Costa Rica, bajo la administración de Rodrigo Chaves, enfrenta un aumento en la inseguridad, la violencia homicida y la actividad del crimen organizado, con cifras alarmantes de asesinatos y homicidios.
Esta iniciativa de cooperación entre las Fiscalías de Costa Rica y El Salvador representa un paso crucial hacia la mejora de la seguridad y el combate efectivo contra la violencia delictiva en la región centroamericana.