El popular presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció que dentro de 3 días pedirá una licencia de 6 meses para dedicarse a la campaña por su reelección y le pidió al fiscal general que investigue a los funcionarios que sean señalados de corrupción.
En cadena nacional, en una transmisión en la que estuvo su gabinete en la Casa Presidencial, el mandatario dijo que aunque no estará en funciones por medio año, todos “deben ponerse las pilas”.
#LoÚltimo | El Presidente @nayibbukele anunció a los funcionarios de su Gabinete que la fiscalización en los quehaceres del Gobierno incrementará durante el tiempo que dure la licencia que solicitará a la @AsambleaSV. Pide de sus funcionarios trabajar aún más, de lo contrario "se… pic.twitter.com/aDkz8EbG6i
— Radio YSKL 📻 💻 📲 (@radioyskl) November 29, 2023
“Habrá algunos que van a estar en ese nuevo gobierno y otros que no”, les dijo, asumiendo algo que, por el momento, se da por sentado, que ganará las presidenciales y logrará una reelección que la oposición le cuestiona a diario.
Las encuestas le dan al mandatario de 42 años y descendiente de palestinos al menos un 90 % de preferencias ante contendientes ralos que no llegan a intenciones de votos de 2 dígitos.
“El que haga algo ilegal, el que no haga nada ilegal y no trabaje bien va a ser destituido”, les recordó.
Bukele se encumbró en popularidad con su mano dura en contra de las pandillas, con un régimen de excepción vigente desde marzo del año pasado que le ha permitido encarcelar a más de 74,000 mareros.
#ElLegadoCorrecto | “Todos los que están acá reunidos son del órgano Ejecutivo, que es del que yo estoy encargado. Solo hay alguien que no es de acá, y es el fiscal general, que no es del Ejecutivo”: Presidente de la República, @nayibbukele. #SecretaríaDePrensa pic.twitter.com/WvAQ8kRgEc
— Secretaría de Prensa de la Presidencia (@SecPrensaSV) November 29, 2023
Aunque su política de seguridad le ha permitido bajar los índices de homicidios de manera “sorprendente”, le ha ganado una marejada de críticas de sus opositores y organismos, locales y extranjeros, que velan por los derechos humanos.
Una reinterpretación de la Constitución, hecha por magistrados de la Corte Suprema de Justicia que son afines a su gobierno, le ha servido de aval para buscar la reelección, algo que para los puristas sigue siendo ilegal.