El obispo nicaragüense Rolando Álvarez pasa su cumpleaños 57 encarcelado por la dictadura

El prisionero político más emblemático de la desmedida dictadura de Nicaragua, Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, está prisionero en la temida cárcel La Modelo. Su condena son 26 años de prisión.

El nicaragüense monseñor Rolando Álvarez cumplió 57 años de vida este lunes, encarcelado por decisión de la dictadura de su país, y diferentes personalidades de la resistencia hicieron muestras públicas de su afecto y respeto para el sacerdote que ha demostrado tener una inquebrantable convicción por su pueblo y sus ideales.

Álvarez, obispo de Matagalpa y convertido en el prisionero político más emblemático de un régimen carnívoro en contra de la Iglesia Católica, está prisionero desde agosto del año pasado y ha sido condenado a 26 años de prisión por los cargos infundados favoritos del régimen: complot contra el gobierno y la patria.

El exiliado obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio Báez, dijo desde Miami vía redes sociales, que admira su testimonio como hombre de Dios.

“Rolando, hermano querido, hoy en el día de tu cumpleaños celebro con alegría el don de tu vida. ¡Seguimos orando y luchando por tu pronta liberación”.

Álvarez, un sencillo religioso muy comprometido con las causas justas y sociales, decidió en 2 ocasiones rechazar su libertad, porque ello implicaría el destierro y prefiere luchar desde su trinchera, su país.

Félix Maradiaga, exprisionero político liberado en febrero y uno de los opositores más activos en el exilio, dijo que “elevamos nuestras oraciones por su salud y fortaleza y pedimos a Dios por su liberación y la de todos los presos políticos”.

Las noticias sobre Álvarez son escasas y han pasado varios meses desde la última vez que la dictadura permitió que se le viera. Se sabe que lo mantienen aislado y que con frecuencia le niegan la asistencia médica requerida. 

En Miami, Florida, nicaragüenses se manifestaron para exigir la liberación del obispo.

 

Nicaragüense en Miami pide por la liberación del obispo Rolando Álvarez.

Convertido en un símbolo de la resistencia nicaragüense, que debe vivir sometida por un régimen que no tiene ningún reparo en desterrar tanto a religiosos como empresarios, a confiscar desde casas hasta universidades de “opositores” y de tejer cualquier invento jurídico para mandar tras las rejas a cualquier disidente, el obispo que muchos recuerdan como el activo y comprometido pastor de su grey, Álvarez pasa así su segundo cumpleaños en prisión y a pesar de la aplanadora de la dictadura, el religioso mantiene erguido su valor y compromiso con su Nicaragua.

Álvarez recibe este lunes el premio “Carisma”, de parte de la Conferencia Española de Geligiosos.

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