Obispo nicaragüense exiliado exige de nuevo liberación de monseñor Álvarez

El exiliado obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, denunció que el encarcelado monseñor Rolando Álvarez es ultrajado por la dictadura de su país y exigió su inmediata liberación.

Báez, exiliado en Estados Unidos desde el año 2019, recordó que Álvarez “es testigo del evangelio y profeta de Dios, injustamente ultrajado y encarcelado”, y en esa triste realidad, tiene la fe que “muy pronto” estará libre.

Desde la parroquia de Santa María del Lago, en la diócesis de Chicago, el obispo rememoró que los cinco años que han transcurrido desde la rebelión del pueblo nicaragüense en abril de 2018 han sido desde luego “duros y dolorosos” para el pueblo de este país centroamericano. Aunque considera que no todo ha sido negativo.

Monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, exiliado en Estados Unidos.

Estima que estas crisis sociales y políticas que llevan a cabo como una materia de clase, los dictadores, ha vuelto más fuerte a los nicaragüenses “nos hemos vuelto más cercanos. Y solidarios unos con otros, el dolor nos ha hecho madurar como sociedad, nos hemos vuelto más conscientes de nuestra responsabilidad por realizar un cambio social pacífico y construir una sociedad más justa”, reflexionó.

“Aun en medio de la opresión y la crueldad a la que sigue sometido nuestro pueblo” ha sido resiliente, ha demostrado su valentía llena de grandeza, compromiso y su dignidad, ante todo, así como un espíritu indomable y una vocación por la libertad y la justicia inquebrantable. Los tiranos no han podido someter a nuestro pueblo recio, noble y creyente, que sigue resistiendo, soñando y luchando”, agregó.

Recordó que ese odio que caracteriza a la dictadura de Ortega y Murillo, en los últimos 5 años, la iglesia ha sido víctima de todo tipo de acoso, persecución y deslegitimación en el intento de acabar con ella. 

 “Sigue siendo calumniada, perseguida y ultrajada por ser fiel a la misión que ha recibido de Jesús, por ser testigo de la verdad de Dios y denunciar la mentira y la injusticia y por defender a las víctimas y la dignidad de las personas”, dijo.

Monseñor Rolando Álvarez, condenado a 26 años de prisión por “formar parte de un complot” contra el régimen, se negó a ser sacado de la cárcel para ser desterrado. Un día después, el 10 de febrero de este año, lo sentenciaron. Es uno de los prisioneros políticos más emblemáticos en Nicaragua.

Exit mobile version